Las tareas de albañilería van desde la construcción de una casa a pequeñas reformas en interiores. Sobre estas últimas encontrara amplia información en las próximas entradas.
El resto queda en manos de los profesionales.
Materiales y herramientas para reformas
Meterse en obra
A la hora de hacer pequeñas reformas en su hogar deberá tener presente sobre todo cuales son los materiales adecuados. El secreto esta en la mezcla.
En esencia, el trabajo de albañilería consiste en mezclar los distintos materiales de construcción precisamente, estos elementos, son el recurso más importante del albañil profesional. Por lo tanto, también lo serán para el albañil aficionado que se ponga en obra. Cuando se secan, los materiales y la mezcla –esta última utilizada para unir y revocar– dan solidez a la obra. Es por esa razón que se debe prestar especial atención a la hora de elegirlos, en función del tipo de obra que se vaya a realizar. Pero atención: algunos materiales son más sensibles a la humedad, por lo que conviene protegerlos para que no pierdan sus propiedades básicas.
Materiales de unión
Los materiales base usados en albañilería son el yeso, el cemento, el pórtland y en menor medida, la cal. Tanto el cemento como el yeso funcionan como una masa que permite unir, mientras que la cal se utiliza mezclada con otras sustancias, sobre todo para la aplicación en paredes. Existen un segundo grupo: los obtenidos a partir de la unión de materiales áridos-arena, piedras y pedregullos-. La mezcla más utilizada en albañilería-resultado de unir cemento y arena- se utiliza para levantar paredes. El hormigón-combinación de cemento con arena y pedregullo– se emplea para obras de mayor envergadura porque es enormemente resistente.
Materiales de construcción
Piedra, ladrillos, hormigón e incluso yeso son los materiales que se utilizan para levantar una construcción.
Por sus propiedades, cada uno tiene utilidades diferentes. Especial atención se dedicará en estas páginas a los diferentes tipos de ladrillos y a las versátiles placas de yeso.
Las palas son una herramienta imprescindible para el albañil aficionado. Le serán de gran ayuda a la hora de preparar el material para la obra.
Para qué sirven los materiales de unión
El cemento es uno de los materiales de mayor resistencia por lo que se suele utilizar para la fabricación de vigas, columnas y otros soportes. Como ya se dijo, combinando con otros materiales se obtiene hormigón. El yeso, por su parte, generalmente está limitado a los trabajos de interior y se emplea como el material ideal para pequeñas refacciones.
La mezcla de Pórtland e usa, principalmente, para revocar y aplicar en construcciones de ladrillo. Por último, el hormigón se destina a obras de gran envergadura.
Principales herramientas
Para los trabajos de albañilería necesitará útiles que seguramente ya posee, como martillos, cinceles, espátulas, plomadas o niveles de burbuja.
No obstante, también deberá disponer de herramientas específicas. Es el caso de las palas, que se utilizan para aplicar los materiales a la mezcla, y las cubetas o bandejas-recipientes donde se preparan pequeñas cantidades-. También necesitara una llana de acero para aplicar el yeso, el enduido o hacer revoques. Por último, si tiene que romper un sector de una pared, precisará una maceta-similar a un martillo muy grande- y un corta fierro-herramienta parecida al cincel, pero más resistente-.
Ultima imagen cortesía: eltallerderolando.com