Una de las preguntas que más nos hacemos cuando al fin tomamos la decisión de renovar nuestro hogar, es: ¿de qué modo podemos decorar la habitación principal sin que quede faltando nada y sin que la saturemos de artículos?
Y es que al ser el cuarto más importante de la vivienda, es habitual que creamos que debamos guardar allí hasta los juguetes de los niños o artículos innecesarios que para nada nos van a servir. Así que en vista de que este dilema no es solo tuyo, elaboramos una lista con algunas de las cosas que deberías y no deberías tener en la habitación que compartes con tu pareja.
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Lo que es necesario:
Closets y mobiliario: Desde luego este es el lugar para ambos, es decir donde deberán estar todas sus pertenencias, así que un closet para los dos, estaría bien y procura que no ocupe demasiado espacio. Igualmente debería existir una zona fuera de la cama, en la cual poder descansar o recibir a cualquiera que entrara allí, por lo cual un sofá de 2 o 3 puestos, no lo vendría nada mal.
Sobre las mesas de noche, es necesario que sean pequeñas y en lo posible que haya una de cada lado de la cama para que los dos tengan un sitio para guardar objetos personales como relojes, aretes, billetera y demás.
En la pared: No es necesario colocar mil pinturas y cuadros enormes, bastaría con un par y que por lo menos uno de los arreglos, sea un cuadro rememorativo donde estén los dos (una fotografía de la pareja). Esto le da un toque mucho más romántico y personal a la habitación.
Lo que no es necesario:
Tapetes y sabanas guardadas: A veces creemos que es bueno tener las sabanas y tapetes en el armario para cambiarlas de vez en cuando, pero ten en cuenta de que se trata de la habitación de pareja, no del cuarto de planchado. Así que evita llevarte para allá, objetos innecesarios como edredones, cortinas, alfombras, tendidos y cubre lechos, para eso puedes disponer de un lugar especial en otro cuarto de la casa.
Espejos: A pesar de que son muy necesarios, la habitación solo debería tener un espejo si es que no tiene un baño interior. En todo caso, lo mejor será siempre acudir al baño para realizar labores de belleza y dejar ese espacio libre para darle más libertad a la habitación y permitir la entrada de lo justo.
Respecto a los espejos de pared, no son una buena idea ya que rompen por completo la estética de los sitios y no son lo que en verdad se necesita.
Como lo ves, es más sencillo de lo que parece y siempre podrás realizar las pruebas que gustes hasta encontrar una armonización de los objetos con las formas.